De los mares calientes, los corales se propagaron unos 3700 kilómetros. Groenlandia fue el lugar elegido donde creció el higo y el árbol del pan. Alaska fue regocijo para las palmeras. Fue así que en la historia de los dinosaurios, los de sangre fría se fueron al norte y allí se multiplicaron.
Era tanta la vegetación que había en los pantanos y demás depósitos de , como los helechos y "colas de caballo", que aquí fue donde los saurisquios se fueron convirtiendo en los más conocido de este tipo, fue el Brontosaurus
  que su nombre viene del griego bronté, trueno, y sauros, lagarto.
Contaba con un peso de 30 toneladas y medía de largo unos 20 metros. Contaba con un largo cuello, en donde estaba su pequeñísima cabeza, con una boca muy pequeña, sus dientes eran frágiles. Su cerebro era muy chico y rudimentario, que por lo que hemos estudiado, creemos que le servía solo para abrir y cerrar la boca, tenía los sentidos muy poco desarrollados. En cuanto a sus narices y ojos, sabemos que se ubicaban tal cual la tienen los cocodrilos, hipopótamos y ranas, estas se encontraban en la parte superior del cráneo, esto es típico de los  de agua dulce. Esto les permite mantenerse sumergidos y la vez pueden observar el ambiente aéreo. Este ejemplar en la historia de los dinosaurios, es uno de los más importantes es por eso que le dedicamos tanta atención. También sabemos que el movimiento de sus patas traseras, estaban dados por un gran ganglio nervioso, que se encontraba en la base de la médula espinal. Sin lugar a dudas los mayores reptiles eran saurisquios, las especies más extravagantes que la naturaleza nos dio nacieron en el reino de los ornitisquios.